la inmortalidad

Todos hemos leído la fantástica noticia del pólipo "inmortal".

Buen momento para filosofar sobre la inmortalidad.

Es cierto que el pólipo necesita de un principio, y todo lo que tiene principio tiene final, por lo tanto, además de poder cocinártelo, su supuesta "inmortalidad" es algo ridículo.

Si se quiere hablar así, no seré yo el que lo impida, más que nada para recordar la inmortalidad del alma.

Pero esa forma de hablar me hace valorar nuevamente la importancia de la filosofía, para trascender de lo material. Sí, la ciencia se quiere adueñar de los conceptos utilizados por el hombre para explicar las causas del ser, la existencia, la materia, el comienzo y el final de la creación.

Algunos estarán orgullosos de haber descubierto algo inmortal que es material, para atacar a los creyentes su fe en el más allá. Verdadera estupidez.

La materia prima ya se vino diciendo hace muchos siglos, en la Grecia Antigua, por los más respetables filósofos, siendo potencia pura, no se puede decir que no exista desde siempre y para siempre, sin embargo su esencia es potencialidad. Por lo tanto, todo ser contingente, necesita de un acto, tanto para su ser, como para que la forma configure el individuo en la materia. Deberíamos decir la medusa cuya vida es potencialmente infinita, por estar destinada desde el principio a renovar sus genes ante la falta de alimentación u otro peligro, se reproduce en sí misma, dando lugar a un individuo en el mismo individuo, muriendo el viejo y naciendo el nuevo. Se podría hablar de una autogeneración programada de múltiples individuos en la misma sustancia, o se podría hablar de una muerte prevista para un nuevo nacimiento en el individuo, o de un cambio genético programado por los mismos genes, a lo sumo.

¿Eso significa que no utilicemos la ciencia material para investigar y saber qué propiedades pueden ser útiles para el hombre, primer destinatario de la naturaleza, en todas las cosas materiales?. Pues sencillamente, no.

La verdad es que no sé en qué puede ser útil esta información naturista, tan difundida con un avance en la investigación, y que ya se reprodujo en junio pasado, quizá para diseñar productos cosméticos. Es más útil saber que la inmortalidad se refiere al espíritu, entre ellos el alma racional, que permanecerá una vez corrompido el cuerpo en suspensión, hasta la reencarnación al final de los tiempos, adquiriendo su máxima belleza el cuerpo necesario para esa alma humana, pues así lo dispuso el Creador de la medusa en nuestra naturaleza humana.

Foto: ScienceNews
La hidromedusa Turritopsis nutricola tiene la capacidad de revertir su estado adulto y convertirse en pólipo. Se adapta a todo tipo de temperaturas y de agua, incluso dulce.
Una hidromedusa, que tiene la fantástica capacidad de revertir su estado adulto y convertirse de nuevo en pólipo se está extendiendo rápidamente por los océanos y mares del mundo.
Se trata de la Turritopsis nutricola, un organismo que realmente riza el rizo ya que al retornar al estado pólipo supone que un ejemplar nunca muere como tal.
Este proceso de ‘inmortalidad’ comienza cuando la Turritopsis no encuentra alimento o se enfrenta a cualquier otro peligro. En ese momento invierte su ciclo vital, “como si una mariposa pudiera volver a su estado de oruga“, afirma Maria Pia Miglietta, de la Universidad del Estado de Pensilvania.
Por otro lado, análisis de su ADN también han revelado que el cambio de estado puede ser debido al lugar donde crece esta especie de hidromedusa, ya que en Panamá el número de sus tentáculos es ocho, en cambio, en el Mediterráneo puede variar entre doce y 24, y en en las costas de Japón, la cifra aumenta hasta 14.
Lo que parece claro es que se adaptan perfectamente a todo tipo de temperaturas y de agua, incluso dulce. Ahora hay que definir el impacto que pueden tener en otras especies, según publica ScienceNews.